Dormir es uno de los placeres más saludables que pueden existir, porque después de una noche de sueño reparador tu cuerpo estará cargado con la mejor disposición para el nuevo día. Pero, ¿sabías que la posición que adoptas al dormir influye en la calidad de tu descanso? Aquí te contamos más al respecto.
Introducción
Si bien es cierto que no existe la posición perfecta para dormir, en la actualidad hay más estudios y evidencia médica que nos indican cuáles son las posiciones más básicas para dormir, junto con sus pros y contras.
Queremos destacar que, en promedio, un adulto cambia de posición de 3 a 36 veces mientras duermes y esta condición puede ser afectada por estímulos externos como la iluminación de la habitación, la temperatura y el ruido, así como el nivel de cansancio del individuo.
Sumado a esto, debemos considerar también que la almohada y el tipo de colchón son importantes a la hora de conseguir un sueño placentero y sin dolores de espalda al día siguiente.
Ahora te vamos a contar un poco sobre las posturas más comunes a la hora de dormir, pero antes vamos a descubrir cuál es la mejor postura según los especialistas.
Descubre la mejor postura para dormir
Con una gran aceptación en la comunidad médica y el respaldo de diferentes investigaciones, dormir del lado izquierdo es considerada la mejor postura para dormir.
El principal motivo es que en esta posición el cuerpo está mejor alineado, favoreciendo el descanso, evitando dolores cervicales y de espalda, al mismo tiempo que reduce los ronquidos.
Por otro lado, esta posición favorece la posición del estómago que queda pendiendo del lado izquierdo y se reduce el reflujo gástrico. Así que, si sufres de acidez por la noche, te será conveniente dormir de lado izquierdo.
Además, en esta posición los residuos digestivos se movilizan mejor desde el intestino grueso hacia el colon, mejorando los procesos digestivos.
Otro beneficio, recientemente descubierto, de dormir sobre el lado izquierdo está asociado a la prevención de alzheimer y demencia, ya que en esta posición el sistema glinfático funciona mejor.
Dicho sistema es el encargado de limpiar los desechos del sistema nervioso, drenando todas las sustancias nocivas que nuestro cerebro no necesita. Por lo tanto, dormir del lado izquierdo favorece este drenaje.
Asimismo, para las mujeres embarazadas esta posición es favorable y muy recomendada por los médicos, pues de este lado se mejora el bombeo sanguíneo y aumenta la calidad de nutrientes que llegan a la placenta, siendo positivo tanto para la madre como para el bebé.
Posiciones básica para dormir
Aunque dormir en decúbito lateral es la posición más recomendada, la realidad es que muchas personas no consiguen hacerlo. Es por ello que hay otras posturas igualmente comunes, pero poco favorables para el organismo. A continuación las resumimos con sus características.
Boca arriba
Esta puede considerarse la segunda mejor posición para dormir, porque en ella el cuerpo se mantiene neutro, al mantener la columna recta, evitándose así los dolores de cuello y espalda.
Sin embargo, dormir boca arriba produce acidez y reflujo gástrico, ya que la cabeza no se encuentra elevada con respecto al estómago.
Asimismo, otro de los contras en esta posición es que favorece los ronquidos, pues existe una obstrucción en el paso del aire porque, naturalmente, la lengua se desplaza hacia la faringe. Este órgano se cierra y en consecuencia vienen los terribles ronquidos.
Boca abajo
Ya está comprobado que dormir boca abajo es peligroso para los bebés, pues aumenta los riesgos de sufrir muerte súbita.
No obstante, para los adultos tampoco es una posición confortable o segura para el buen descanso.
En primer lugar, debemos mencionar que dormir boca abajo fuerza a la columna a una posición que no es natural, ejerciendo presión excesiva en la zona cervical.
A su vez, se comprometen músculos, tendones, nervios y huesos. Toda esa presión puede originar serios problemas de salud como cervicalgia, lumbalgia, entre otros.
Posición fetal
Muchas personas afirman que acurrucarse de lado les ayuda a dormirse rápido. Pero, se debe considerar que esta posición crea una curva pronunciada en la columna que puede generar dolores de espalda.
Además, si te acurrucas mucho puedes crear una presión sobre el diafragma y tener dificultades respiratorias, al mismo tiempo que se produce una tensión en el cuello.
En caso de que esta sea la posición en la que duermes, es aconsejable colocar una almohada firma entre tus rodillas. Lo mismo aplica para dormir de lado, ya que ayuda a aliviar la tensión.
Por su parte, el colchón debe ser lo suficientemente firme para que la región pélvica no se hunda, favoreciendo la alineación de las vértebras.
Adicional a estas posturas, pueden existir muchas más formas de dormir como personas en el mundo, ya que cada individuo va adoptando “mañas” a la hora de conciliar el sueño.
Para las personas saludables, cualquier posición puede ser inofensiva al dormir. Sin embargo, debe prestarse atención a aquellas posturas que pueden perjudicar tu ergonomía postural, tu salud respiratoria y hasta las funciones digestivas.
En este sentido, es importante tomar conciencia de la posición que se va a tener al momento de dormir si quieres descansar y que tu cuerpo se recupere totalmente para la jornada del día siguiente.
De igual forma, previa a la hora de dormir, puedes preparar una rutina que te ayude a conciliar mejor el sueño como practicar técnicas de relajación, evitar el uso del móvil y pantallas dentro de la habitación, así como evitar otros estímulos externos.